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Ernesto Gómez Cruz, leyenda del cine mexicano

Ernesto Gómez Cruz, leyenda del cine mexicano, nació en Veracruz el 7 de noviembre de 1933. Inició su carrera como fotógrafo, pero su destino cambió cuando decidió estudiar teatro en la Ciudad de México, al ingresar al Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL). Su debut en la pantalla grande llegó de la mano del director Juan Ibáñez en Los Caifanes (1967), que marcó el inicio de su vasta trayectoria.

A lo largo de las décadas de los setenta y ochenta, Gómez Cruz se consolidó como uno de los actores más destacados del cine mexicano, participando en filmes emblemáticos como Auandar Anapu (1974), de Rafael Corkidi; Canoa (1975), de Felipe Cazals; Tívoli (1974), de Alberto Isaac; Cadena perpetua (1975), de Arturo Ripstein, y Maten al León (1997), de José Estrada. Su interpretación del personaje de Dionisio Pinzón en El imperio de la fortuna (1986, dir. Arturo Ripstein) lo catapultó a la fama, abriendo nuevas puertas en su carrera, incluyendo incursiones en el mundo de las telenovelas.

En la última etapa de su carrera, Gómez Cruz brilló como actor de reparto en películas como El Callejón de los Milagros (1995) de Jorge Fons; El crimen del Padre Amaro (2002), de Carlos Carrera; La Ley de Herodes (1999)y El Infierno (2019), ambas de Luis Estrada, demostrando su versatilidad y talento. Su legado en la industria cinematográfica mexicana es innegable, con una filmografía que abarca más de doscientas películas y colaboraciones con directores de renombre.

A continuación, una lista de cinco películas imprescindibles en la filmografía de Ernesto Gómez Cruz:

Los Caifanes (1967) Dir. Juan Ibáñez

Los Caifanes (1967) Dir. Juan Ibáñez

Paloma y Jaime, una pareja de novios de clase alta, escapa de una fiesta con la intención de tener un encuentro amoroso en un coche abandonado, el cual pertenece al Capitán Gato, quien junto a sus caifanes cambiará los planes de la pareja. Así comienza un pintoresco paseo nocturno por cabarets, parques, taquerías, funerarias y vecindades de la Ciudad de México, durante el cual Paloma quedará fascinada por la espontaneidad y forma de hablar del grupo. El argumento de Carlos Fuentes en combinación con extravagantes pasajes inspirados en Federico Fellini y un mosaico de dichos y jergas populares, hicieron de Los caifanes uno de los filmes más importantes del cine mexicano de los años sesenta.

El imperio de la fortuna (1986) Dir. Arturo Ripstein

El imperio de la fortuna (1986) Dir. Arturo Ripstein

Dionisio Pinzón es pregonero en un pueblo de México. Su mano seca lo ha privado de casi todo y vive miserablemente al amparo de su madre, agobiado por rencores solapados. Un día llega a San Miguel del Milagro una feria. Es reclutado como gritón del palenque, en las peleas de gallos.

Canoa (1975) Dir. Felipe Cazals

Canoa (1975) Dir. Felipe Cazals

Basada en hechos reales sucedidos en México en septiembre de 1968, cinco jóvenes empleados de la Universidad Autónoma de Puebla intentan escalar el volcán La Malinche pero, debido al mal tiempo, no tienen éxito y tienen que refugiarse en un pueblo cercano llamado San Miguel Canoa. Debido a la paranoia religiosa vivida en el pueblo en gran medida incitada por el párroco local, el pueblo los confunde con radicales comunistas.

Tívoli (1974) Dir. Alberto Isaac

Tívoli (1974) Dir. Alberto Isaac

Evocación del teatro Tívoli que vivió su mejor época en los años cuarenta y cincuenta. Un grupo de artistas del teatro lee alarmado una nota periodística donde se menciona que su centro de trabajo será demolido con el fin de ampliar el paseo de la reforma. A raíz de esto, se desencadena una serie de acontecimientos que los actores encariñados con su teatro emprenden con el fin de evitar que lo destruyan. 

 El Callejón de los Milagros (1994) Dir. Jorge Fons

 El Callejón de los Milagros (1994) Dir. Jorge Fons

Basada en la novela homónima del escritor egipcio y Premio Nobel Mahfuz. En pleno centro de la ciudad de México, se entrecruzan las vidas e historias de varios personajes. Cansado de su matrimonio con Eusebia, el cincuentón don Ru, dueño de la cantina del barrio, descubre nuevos y extraños sentimientos en su vida. El joven peluquero Abel y el anticuario don Fidel están enamorados de la bella Alma, hija de doña Cata, una echadora de cartas. Susanita busca el amor en el joven Chava y en Güicho, el cínico empleado de la cantina.