05 · 03 · 18 Donde se encuentra la imaginación: lecciones de Jan Švankmajer en la Cineteca Nacional Share with twitter Share with facebook Share with mail Copy to clipboard Gabriela Martínez @GabbMartivel El cineasta checo Jan Švankmajer ofreció una clase magistral en la Cineteca Nacional, con la cual inició la retrospectiva que presentará siete largometrajes y doce cortometrajes de su autoría, a lo largo del mes de mayo. Durante el evento, Alejandro Pelayo, director de la Cineteca Nacional, entregó a Jan Švankmajer la Medalla Salvador Toscano de la Cineteca Nacional, el mérito que entrega la institución a todos los directores de caracter internacional. "Quiero celebrar la trayectoria de uno de los artistas más prolíficos de la República Checa y Europa en general", dijo Pelayo durante el discurso en el cual definió al cineasta checo como un hombre "dueño de una extraordinaria imaginación". Clase magistral de Jan Švankmajer en la Cineteca Nacional Con un estilo inspirado en historias mórbidas, desconcertantes, terroríficas y oníricas, el trabajo de Švankmajer ha sido galardonado con diferentes premios en reconocidos festivales como en Cannes, en el International Annecy Animated Film Festival, en El Festival Internacional de Cine de Bratislava y en la Berlinale. Jan Švankmajer se ha caracterizado por el uso del stop motion y la plastimación, con las que formula las temáticas centrales de sus obras, ya sea el humor negro, el erotismo, los objetos de uso cotidiano o el juego entre realidad y fantasía. El Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) asistió a la clase magistral de Jan Švankmajer, por lo cual presentamos algunas de las lecciones que dejó el cineasta checa durante la charla que ofreció en la Cineteca Nacional. Todo está en el subconsciente No escribo un guion. Dejo una idea básica en el subconsciente y la dejo trabajar. Si es una idea buena, después de un tiempo vuelve a mi mente enriquecida con ideas del subconsciente. Porque de cada película o pintura que vemos, el 80 por ciento se trata de nuestra propia imaginación como espectador y el 20 por ciento restante, es la imaginación del autor. (...) Si en el subconsciente no hay nada, pues tampoco saldrá nada. Como habrán entendido, soy fan de Sigmund Freud. (...) Es en el subconsciente donde se encuentra la imaginación. El surrealismo El grupo surrealista checo existe desde 1934 y sigue vigente. Yo formo parte de este grupo desde los setenta. El surrealismo a mi me enseño tres cosas: a no tener miedo a la colectividad porque el surrealismo es una actividad muy colectiva. Segundo, me enseñó que la poesía es sólo una y da igual cómo se retome. Yo accedo a la poesía mediante collage, objetos, experimentación táctil, por ejemplo. La tercera, es que el surrealismo desarrolló mi imaginación a una amplitud que desconocía. El surrealismo no es esteticismo, pereciera que la estética surrealista global es la de Salvador Dalí, pero no es así; esa es su propia estética. Como decía André Breton sobre el surrealismo: el surrealismo no es arte, es una visión mágica del mundo. 1. Sobre la comida El motivo de la comida lo pueden encontrar en casi todas mis películas, en su forma, digamos, destructiva. Esta obsesión la adquirí en mi infancia y, como sabrán, las obsesiones adquiridas en ese periodo no pueden ser oprimidas tan facilmente. Yo era un niño que no comía (...) aunque ahora ando normalmente, cuando era niño tenían que llevarme en silla de ruedas. El motivo de la comida no sólo lo pongo desde este punto de vista subjetivo. Para mi la comida es un símbolo de nuestra civilización, una civilización agresiva, que se come todo, la cual se está devorando tanto la etnicidad como la naturaleza. 2. Sobre el humor negro Creo que el humor negro y lo grotesco es el género adecuado a la civilización actual. La civilización actual no podría explicarse mediante la poesía del siglo XIX por ejemplo, únicamente el humor negro lo expresa bien. 3. El sonido en el cine de Jan Švankmajer Desde mi primer película colaboré con un solo músico quien no componía para las películas como lo hacen en Hollywood, sino que le buscaba el ritmo a la película y componía directamente en la sala de montaje. En ocasiones me decía que quitara tomas para poder encajar su música en mi película. (...) Tras su muerte, no colaboré con ningún otro músico y desde entonces no uso música, sólo sonidos especiales para todo lo que viene en mis películas. (...) Uso música de archivo y la modifico, la pongo al revés o lo que se me ocurra. Procuro elegir a autores muertos para no tener que ir a juicio. (...) Uso los tesoros nacionales y hago horrores con ellos. 4. El dactilismo Me dedico al dactilismo desde 1974, cuando el régimen comunista me negó hacer películas. El régimen también me negó esta actividad, pero me gustaba llevarles la contraria y de todas formas lo hice. (...) Hice varios experimentos dáctiles, los cuales utilicé en mis películas. Asumí que el tacto estaba estrechamente conectado con los ojos y cooperan a la hora de trabajar. Por ejemplo, en mi cortometraje Dimensiones del diálogo (1982), los amantes retratan una imaginación táctil perfecta y de hecho debo decir que fue muy difícil porque ambos amantes eran de tamaño real. Moldear la plastilina con pulgares era extremadamente difícil, todos los que teníamos pulgares y manos trabajamos para moldearlos, pero después de un par de días ya no podíamos más y tuvimos que moldearnos pulgares de madera para poder seguir. 5. ¿Qué significan sus películas? A todos mis espectadores les digo que todas sus interpretaciones son las correctas. (...) Mis películas no son racionales. A veces me pregunto "¡Por Dios! ¿Cómo hice esa película?" Por eso no quiero pensar que hay una sola explicación (...) Las películas imaginativas como las mías, con el tiempo adquieren nuevos significados. 6. Sobre el cine La cinematografía es una obra mágica. Una razón por la que adoro el cine es por el montaje; es como en los sueños, de pronto puedes estar en un plano, montaje, luego en otro. 7. El consejo para los nuevos cineastas es: No escuches los consejos, sean lo más auténticos posible.