Competencia largometraje documental: Skin Destination

Lo considero una emergencia. Abordar lo corporal en México es pensar el estado de excepción que vivimos, ya rebasados los límites del orden social, en este momento lo político nos alerta sobre la dominación y las dimensiones del biopoder en las cuales navegamos todos los días. En Tijuana, como en varios territorios del país, el cuerpo se ve resignificado cada segundo. A diario miles de cuerpos son sometidos a un estado permanente de alerta y control al cruzar la frontera, mismo escenario en el cual han muerto más de seis mil indocumentados desde 1994. En la ciudad se mantiene uno de los más altos índices de población adicta a diversas drogas y representa el espacio geográfico de mayor riesgo en México en infecciones de transmisión sexual. Cientos de personas son deportadas todos los días a la ciudad, algunos de ellos permanecerán aquí drogados-enfermos, dada la imposibilidad de un programa eficiente de reinserción en sus comunidades y los múltiples abusos a los que se enfrentan. Por otro lado, en Tijuana co-existen laboratorios, hospitales y quirófanos de primer nivel, farmacias-escaparate en donde se encuentra de todo, a toda hora. La ciudad se ha convertido en el destino médico de los residentes del sur de California con millones en derrama a partir de la compra-venta de medicinas, pero al igual que en otros estados, la lucha de carnes del narcotráfico nos ha dejado una cuota de cuerpos mutilados, colgados o depositados en fosas clandestinas. Bajo estas premisas y otras reflexiones surge Skin Destination. En esta ciudad inevitablemente el cuerpo permuta en mercancía de intercambio como unidad de sentido. La pieza me permite pensar sobre el orden social, cultural y político que se manifiesta con tanta cotidianidad que nos queda poco para sorprendernos.

Skin Destination es parte de un trabajo muy cercano con el productor, José Inerzia y con Miriam García, co-guionista. Además de un grupo de colaboradores, todos artistas visuales radicados en Tijuana y alarmados por el estado que se vive en el país, reunirnos fue natural, dado que con algunos trabajamos en otros proyectos, pero como siempre, todo resulta en una cuestión de empatías y trabajo colaborativo. El músico, Paúl León ? el único que no vive en la ciudad (es de Guanajuato) - se sumó en la etapa de post, ya que esta pieza estuvo en la beca de Jóvenes Creadores de FONCA, ahí fue donde lo conocí y se integró al proyecto.

Skin Destination esta conformada por fragmentos de material de archivo familiar en súper 8 y 16mm, para compilar el material abrimos una convocatoria pública para recibir carretes, recuperar archivo y posteriormente realizar los transfers y digitalizar. En esta etapa estuvieron trabajando dos colaboradores fundamentales: Talía Góngora y Jesús Guerra. Sin duda fue la etapa más compleja pero la más sabrosa, llenísima de hallazgos sobre la memoria en imágenes de la frontera, esos tesoros que se encuentran en el corazón de las familias de la región, sin ello, la pieza no podría existir.

Seguir transitando a través del cine de no ficción sin ningún formato o estilo en particular, como territorio de arenas movedizas ya es apasionante. Hay varios temas que me interesan, de momento coinciden en la línea de trabajo a través del cuerpo como pretexto para explorar el entorno en el que me ha tocado vivir.

Una ventana importante para que el público conozca la película y tenga, de entrada, un contexto interesante para dialogar con otras piezas de la selección; además una tremenda oportunidad para conocer otras producciones del país durante el festival. Dados a las listas y las celebraciones, el 10 cierra y abre ciclos, festejemos la ocasión.