04 · 07 · 22

#20FICM: 20 años de ser la sede mexicana de lo mejor de la cinematografía mundial

Berenice Andrade

Berenice Andrade

Desde 2003, ininterrumpidamente, la capital de Michoacán se ha convertido en la capital del cine mexicano durante varios días de octubre. No sólo eso: también se ha transformado en la capital mexicana de la cinematografía mundial, gracias a la nutrida y cálida interacción entre las voces nuevas y más destacadas del cine de autor mexicano, la comunidad cinematográfica internacional y el público, que tiene al alcance de una butaca películas de gran calidad y conversación directa con sus realizadoras y realizadores.

El Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) es el artífice de esta magia. Uno de sus fundadores, Alejandro Ramírez Magaña, Presidente del FICM, dice al respecto: “La magia que sucede en Morelia cada octubre es esa convergencia de talentos, de voluntades, de gente que viene por primera vez, de público aficionado, de público cinéfilo. Es una convergencia que considero mágica porque sólo se ve aquí una vez al año”.

Considerado el encuentro cinematográfico más importante de México, y uno de los más relevantes de Latinoamérica, el Festival Internacional de Cine de Morelia es una Asociación Civil sin fines de lucro dedicada a apoyar a los cineastas mexicanos, cultivar nuevos públicos, y a difundir la cultura cinematográfica de México, mediante una plataforma inclusiva y hospitalaria para los realizadores nacionales, el público en general y la comunidad fílmica internacional. Es apreciado por la crítica cinematográfica nacional e internacional y por el público por su cuidadosa selección de películas y por ser un punto de encuentro único en nuestro país.

Es el único festival de cine en México cuya Selección Oficial en competencia es exclusivamente nacional. Su programación se complementa con una selección de estrenos mexicanos e internacionales, retrospectivas, conferencias, talleres y eventos especiales del más alto nivel. 

Por sus funciones y alfombras rojas han desfilado leyendas y grandes personalidades de la cinematografía mundial, como: Robert Redford, Willem Dafoe, Quentin Tarantino, Alfonso Cuarón, Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro, Werner Herzog, Juliette Binoche, Gael García Bernal, Salma Hayek, Diego Luna, Isabelle Huppert, Jennifer Lawrence, Robert Rodriguez, Tim Roth, Lucrecia Martel, Peter Greenaway, Alejandro Jodorowsky, Terry Gilliam, Pawel Pawlikowski, Audrey Tautou, Steven Soderbergh, Gus Van Sant, Luc Dardenne, Tommy Lee Jones, Béla Tarr, Barbet Schroeder, Olivier Assayas, Laurent Cantet, Geraldine Chaplin, Bruno Dumont, Amat Escalante, Stephen Frears, Thierry Frémaux, Rodrigo García, Richard Glatzer, Todd Haynes, Michel Hazanavicius, Abbas Kiarostami, Dieter Kosslick, Sebastián Lelio, Cristian Mungiu, Gregory Nava, Bulle Ogier, Manoel de Oliveira, Marisa Paredes, Arthur Penn, Nicolas Philibert, José María Prado, Bob Rafelson, Édgar Ramírez, Pierre Rissient, Raúl Ruiz, Volker Schlöndorff, Whit Stillman, John Sayles, Jerry Schatzberg, Bertrand Tavernier, Wash Westmoreland, entre muchos, muchos, muchos más. 

Además, como parte de su compromiso con la comunidad michoacana, el FICM desarrolla el proyecto “FICM Presenta Pátzcuaro”, que apoya a la difusión de la cultura cinematográfica y favorece la preservación del patrimonio de la comunidad de Pátzcuaro, por medio de funciones durante todo el año en el cine-teatro Emperador Caltzontzin. Este cine-teatro, construido en 1936, fue restaurado por el festival, el cual actualmente supervisa su operación.

Dentro del marco de esta iniciativa, el FICM ha desarrollado el proyecto “Cine Mexicano en Acción”, el cual ha presentado funciones de películas mexicanas en espacios comunitarios de municipios de la región lacustre de Pátzcuaro. Varias de estas funciones han contado con la presencia de talento.

Un festival que nació para impulsar el cine mexicano

Aunque fue un 3 de octubre de 2003 cuando arrancó la primera edición del FICM, la historia del festival se cuenta desde varios años, casi una década, atrás. 

En los albores del siglo XXI, la industria del cine mexicano resurgía después de una difícil racha, la producción de largometrajes era escasa y los jóvenes cineastas necesitaban un espacio para mostrar sus trabajos. Ya en 1994, Daniela Michel, fundadora y directora general del FICM, había creado junto con Enrique Ortiga las Jornadas de Cortometraje Mexicano en la Cineteca Nacional, un evento único en nuestro país que buscaba agrupar y difundir el trabajo de jóvenes directores mexicanos. 

Después de varias ediciones de las Jornadas de Cortometraje en la Cineteca Nacional, nació la necesidad de hacer un festival dedicado al cine mexicano. En 2001, Daniela Michel le propuso a Alejandro Ramírez llevar a Morelia las Jornadas de Cortometraje Mexicano, con el fin de descentralizar la exhibición de las obras de nuevos talentos nacionales y continuar con la promoción del trabajo de una generación de realizadores.

A principios de 2002, el arquitecto y promotor cultural michoacano, Cuauhtémoc Cárdenas Batel, quien ya tenía la intención de realizar un encuentro de cine en el estado, se unió al proyecto. Los tres vincularon sus ideas y le dieron forma a lo que se convertiría en el Festival Internacional del Cine de Morelia.

En una entrevista para conmemorar los 15 años del FICM, Cuauhtémoc Cárdenas Batel habló de los inicios: “El primer festival empezó como un festival más pequeño, no sólo en sus alcances, sino en sus propias ambiciones porque empezamos con un concurso de cortometraje, que era un poco lo que venía haciendo Daniela en la Cineteca, y recibimos sorpresas muy agradables”.

Inicialmente, sólo participaron cortometrajes, documentales y obras michoacanas. A partir de 2007 se agregaron largometrajes mexicanos —óperas primeras y segundas películas—. En 2013, la competencia de largometraje amplió su convocatoria para todos los directores mexicanos, tanto noveles como consagrados.

“Reunidos en el Primer Festival Internacional de Cine de Morelia, nos complace reconocernos como una comunidad en pleno desarrollo”, escribió Daniela Michel en el catálogo de aquella primera edición del FICM. Esa comunidad fue creciendo junto con el festival, que fungió como plataforma para el desarrollo de toda una generación de cineastas mexicanos que presentaron sus primeros cortometrajes en el festival para luego volver con sus óperas primas y representar a México, con sus obras, en los festivales más destacados de todo el mundo; tal es el caso de Elisa Miller, Matías Meyer, Jorge Michel Grau, Kyzza Terrazas, Nicolás Pereda, Rigoberto Perezcano, Michel Franco y Fernando Frías, entre muchos otros.

Grande pero íntimo

“Caminar de noche por esas hermosas calles después de haber visto grandes películas e ir conversando sobre ellas. A la vuelta de una esquina, encontrarse con amigos y reunirse para seguir charlando”, describió el actor Daniel Giménez Cacho a la pregunta de cuál era el momento que más atesoraba del FICM.

Y es esa intimidad fraternal la que ha caracterizado al FICM en toda su historia y la que lo ha destacado de otros festivales de México y el mundo: la posibilidad de ver lo mejor de la cinematografía nacional e internacional al tiempo de disfrutar de las bondades de una ciudad con una riqueza cultural sin parangón como Morelia.

Realizadores, invitados y público conviven entre salas de cine, andadores y cafés como una sola comunidad. La calle Santiago Tapia, el Jardín de las Rosas y el resto del Centro Histórico de Morelia, Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1991, se convierten en extensiones de las salas de cine en donde se encuentran todos.

El público convive, hombro con hombro, con las y los creadores de las películas que acaban o están por ver, y es por eso que el Festival rebosa de anécdotas entrañables, como aquella cuando, en el 15º FICM, tras presentar en Cinépolis Morelia Centro su película La forma del agua, Guillermo del Toro regresó a la alfombra roja para firmar todos y cada uno de los autógrafos que el público le pidió. 

“Morelia se mantiene como lo mejor que he experimentado al crear esa mezcla entre lo social y lo cinéfilo. Estar en una fiesta bastante íntima donde están presentes los principales programadores de Cannes y la cabeza de Berlín es raro. Pero en Morelia todo parece posible”, comentó Nick James, quien fuera editor de la prestigiosa revista británica de cine Sight & Sound.

Grandes alianzas

En 2017 la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles, entonces dirigida por Gustavo Dudamel, interpretó un programa de música de cine mexicano, creado en conjunto por el cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu y por Daniela Michel.

Si bien la colaboración parecía particularmente extraordinaria por su naturaleza musical, era una más de la gran lista de alianzas que el Festival Internacional de Cine Morelia ha hecho a lo largo de sus historia y por las que alguna vez, Thierry Frémaux, director del Festival de Cannes, comentó que el FICM es uno de los festivales más importantes del mundo. 

Desde su fundación, el FICM mantiene un vínculo con la Semana de la Crítica del  Festival de Cannes, la cual se ha especializado en presentar primeras y segundas películas. Fue en esta sección donde fueron descubiertos internacionalmente Guillermo del Toro y Alejandro González Iñárritu. En una alianza única en su tipo, una selección de películas de la Semana de la Crítica se presenta año con año en el FICM, con la presencia de algunos de sus realizadores. A su vez, la Semana de la Crítica proyecta una selección de trabajos mexicanos presentados en el FICM. Esta es una oportunidad excepcional para cineastas mexicanos.

Desde 2008, el FICM está oficialmente reconocido por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMPAS) de los Estados Unidos de América, por lo cual los cortometrajes ganadores en las categorías de Ficción, Animación y Documental, así como los documentales ganadores del Ojo a Largometraje Documental Mexicano son elegibles para inscribirse a los premios Oscar.

Además, como parte de las muchas actividades de promoción en el mundo del cine nacional, el FICM ha presentado en el Museo de Arte Moderno (MoMa) de Nueva York ciclos de películas curados con el invaluable apoyo de la Cineteca Nacional, la Filmoteca de la UNAM y Fundación Televisa: “Mexico at Midnight: Film Noir from Mexican Cinema’s Golden Age”, “Julio Bracho and the Golden Age of Mexican Cinema”, “El Indio: The Films of Emilio Fernández” y “Roberto Gavaldón: Night Falls in Mexico”.

Asimismo, el Festival Internacional de Cine de Morelia ha colaborado en distintas iniciativas de formación e industria como los talleres de Locarno Industry Academy International del Festival de Locarno, y el Laboratorio de Historias Morelia / Sundance, del Sundance Institute. 

Con todo esto, no es de extrañar que cineastas como Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro sientan un cariño sin igual por el FICM y lo expresen de esta manera:

“El festival de Morelia es un referente cultural en el mundo, un evento cultural fundamental en México; es una parte del tejido social, no sólo de Morelia, sino también de México; y, los que hemos tenido la fortuna de participar, somos parte de una comunidad generosa y emprendedora”: Alfonso Cuarón.

“El equipo entero del festival decidió sostener este escaparate —que es importantísimo para México y para el cine mundial— con voluntad, con lucha y con absoluta coherencia. Daniela Michel es el pilar de pilares de este festival que ya no es sólo importante a nivel nacional, sino uno de los eventos más importantes culturalmente para el cine a nivel mundial”: Guillermo del Toro.

¡Los esperamos en el Festival Internacional de Cine de Morelia!