20 · 10 · 24 “Me siento totalmente dueño de las películas que fotografío”: Rodrigo Prieto da MASTER CLASS en el 22° FICM Compartir en twitter Compartir en facebook Compartir con correo Copiar al portapapeles Gustavo R. Gallardo En un momento en el que los cinefotógrafos mexicanos se destacan en la escena mundial con grandes producciones, Rodrigo Prieto, uno de ellos, ahora en su faceta como director con Pedro Páramo, comenta sentirse también un poco como el autor de las películas que fotografía, y añade con seguridad: “Me siento totalmente dueño de eso”. Rodrigo Prieto Como parte de sus actividades en la edición 22 del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), el autor visual de cintas como Amores perros (2000), El irlandés (2019), Los asesinos de la luna (2023) y Barbie (2023), abordó cómo fue —lo dice en tono de broma— "hablarse a sí mismo" para Pedro Páramo, ya que dirigió y fotografió la cinta.“En Pedro Páramo no tuve que esperar al fotógrafo”, menciona entre risas, recordando una declaración que hizo hace más de 20 años, cuando filmaba Amores perros con Alejandro González Iñárritu, sobre que no le gustaría dirigir porque tendría que esperar a que el cinefotógrafo termine de preparar la escena. Erick Estrada, Rodrigo Prieto “El director termina con los actores y tú, como fotógrafo, estás pensando todo el tiempo en el siguiente plano, en dónde colocar la cámara... ¡no paras!”, comenta.El crítico de cine Erick Estrada, moderador de la master class, señaló que Pedro Páramo no fue solo un proyecto paralelo a Los asesinos de la luna y Barbie, sino que además es la tercera versión de esta obra filmada por un cinefotógrafo mexicano de alto nivel. La primera versión, de 1967, fue fotografiada por Gabriel Figueroa, dirigida por Carlos Velo; y la segunda, por Jorge Stahl Jr., bajo la dirección de José Bolaños, “dos pilares del cine”."¿Qué tan visual es Juan Rulfo que hemos necesitado tres cinefotógrafos de tu talla para captar el vasto universo de Pedro Páramo?" preguntó Estrada."El lenguaje de Rulfo es muy poético y sonoro. Él mismo era fotógrafo y se convirtió en un referente importante para la película, fue una inspiración… En la novela hay atmósferas poéticas, pero la intención era traducir eso a imagen," respondió Prieto. Master Class de Rodrigo Prieto en el 22° FICM Prieto mencionó que filmar una nueva versión de Pedro Páramo fue un reto no solo en lo profesional, sino también en lo personal, ya que, al igual que el personaje, tuvo que hacer una retrospectiva de su árbol genealógico. Habló de su abuelo materno, Jorge Prieto Laurens, quien tuvo un papel relevante en la política durante la primera mitad del siglo XX.“Traigo detrás generaciones de Prietos muy cabrones, y llevo muchos años tratando de entender qué hay en mi propia sangre, cosas que incluso no me gustan y que he peleado de mi personalidad… No me imaginaba que eso sería Pedro Páramo”, apuntó el cinefotógrafo.Prieto, al ser cuestionado sobre su experiencia al fotografiar y dirigir al mismo tiempo, explicó que aunque considera que el trabajo del fotógrafo es ser un canal para el director y "entender su mundo", en Pedro Páramo trató de escuchar y atender ambas voces.“Era como compaginar el aspecto visual con el actoral. Finalmente, todo está mezclado, para mí no se puede separar. Por eso siento que las películas que fotografío también son, en cierta medida, mías. Me siento totalmente parte de la creación… Es una película que hago con y para el director, pero me siento completamente dueño de eso”, subrayó.