17 · 08 · 23 DOS ESTACIONES, un retrato de la vida cotidiana: entrevista a Juan Pablo González Compartir en twitter Compartir en facebook Compartir con correo Copiar al portapapeles Aura Resendiz Dos Estaciones (2022) es el primer largometraje de ficción del director Juan Pablo González, conocido por su trabajo en el cine documental con cintas como Caballerango (2018) y los cortometrajes ¿Por qué el recuerdo? (2014), The Wait (2016) y Las nubes (2017). Su ópera prima sigue a María García, heredera de una fábrica de tequila en Jalisco, que contra todo pronóstico lucha por mantener su negocio en medio de la expansión y dominio de las corporaciones extranjeras. Mientras la situación empeora, conoce a Rafa, su nueva administradora. Dos estaciones (2022, dir. Juan Pablo González) Dos Estaciones formó parte de la Selección Oficial del 20° Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), además obtuvo el Premio Especial del Jurado en la Competencia de Cine Mundial, en la categoría de actuación, en el Festival de Cine de Sundance. De igual forma, la cinta fue parte de la 73a Muestra Internacional de Cine de la Cineteca Nacional, celebrada entre marzo y abril de 2023. El FICM tuvo la oportunidad de platicar con Juan Pablo González sobre Dos Estaciones, así como sobre su cercanía con Los Altos de México y sus reflexiones alrededor de la representación de la industria tequilera. FICM: Tu trabajo anterior, Caballerango (2018), fue un documental, Dos estaciones (2022) es una película que en muchos momentos navega entre la ficción y el documental, ¿por qué decidiste incluir de cierta manera a ambos géneros en esta película? Juan Pablo González: Yo quería hacer una ficción sobre este personaje, María, pero no sabía cómo hacer una ficción, digamos técnicamente. Entonces, lo que hicimos fue crear un proceso de documental para producir una ficción y entonces creo que eso hizo que naturalmente hubiera muchos elementos documentales en la película. FICM: Creciste en Atotonilco, cerca de la industria tequilera, un tema que la película aborda. ¿Qué tanto hay de tus anécdotas, vivencias y experiencias relacionadas con la industria del tequila en esta película? JPG: De mis experiencias no tanto, pero sí de cosas que yo he observado, sobre todo en relación al personaje principal, a María. Las cosas que está intentado sortear son algo que yo he visto en mucha gente que conozco en la región, digamos. FICM: ¿Hay alguna anécdota particular que destaques mucho o que en ese momento te haya inspirado para hacer la película? JPG: Déjame pensar. Fíjate que no tanto una anécdota particular fue lo que me dio el primer impulso para hacer la película, sino más bien el personaje de María. A mí me interesaba mucho la generación de productoras y productores de tequila, como María, que más o menos nació en los cincuentas, principios de los sesenta, y que fue el puente entre una manera de pensar y producir el tequila de manera, digamos, más artesanal, y este mundo hiperindustrial y súper globalizado. En ese sentido, los papás de María habrían hecho tequila en un momento en el que el tequila no era ni siquiera una industria, era algo que estaba relacionado más al comercio local y solo en una generación se convirtió en una cosa no solo nacional e industrial sino algo hiperglobal. Por eso me interesa tanto esa generación. FICM: Aunque la película retrata la crisis y la gran presencia de las empresas extranjeras, el foco está principalmente en María. ¿Cómo fue la construcción del personaje? ¿Fue progresivo? ¿Tuviste apoyo de Teresa Sánchez? JPG: Sí, fue totalmente progresivo y colaborativo. Entre las dos coguionistas, Ilana Coleman, Ana Isabel Fernández, Teresa y yo. Teresa tuvo mucho que ver con la construcción de su personaje. En mi opinión, en mi manera de ver esta región particular de los Altos de Jalisco, hay una expresividad muy particular en la gente. Creo que con Tere y la mayoría de las personas que aparecen en la película, que son no actores o actores y actrices que no están entrenados y son de la región, logramos mostrarlo. Esa expresividad, pues ya existe naturalmente en quienes son de allá, pero para Teresa eso era un trabajo que teníamos que construir con ella, no sólo el personaje, sino cómo caminaba el personaje, cómo hablaba, cómo se vestía, y fue un proceso gradual. Empezamos a trabajar con Tere en 2017 y filmamos la película en 2020, entonces durante todo ese tiempo, tuvimos muchas conversaciones, filmamos cosas con Teresa Sánchez para ir construyendo su personaje hasta que llegamos al rodaje principal en 2020. Para entonces creo que ya tenía muy claro quién era María. Dos estaciones (2022, dir. Juan Pablo González) FICM: Dos estaciones también aborda temas como la sexualidad, pero desde la perspectiva de una generación que aún tiene muy arraigada la tradición, ¿por qué decidieron incluir este tema en la película? JPG: Bueno, parte de lo que queríamos construir con el personaje de María era también un personaje que desafiara un poco el estereotipo de la feminidad alteña. Creo que eso influenció mucho en cómo fuimos construyendo a María, un poco cómo se comporta con los demás, y también el hecho de que en la película es soltera, no tiene pareja, nunca vemos que tiene como intenciones de tener una pareja, por ejemplo, una pareja masculina, no, que eso es como lo esperado en la región, bueno, no en la región, pero lo que se espera de ver un personaje de esta región, y siempre estuvimos pensando en esas cosas cuando íbamos escribiendo por dónde pasaban las emociones de María, por qué estaba atravesando por esas emociones y con quién. Sí, eso fue lo que pensamos en relación a María particularmente. Creo que en relación a pensar la sexualidad, nosotros estábamos pensando en los estereotipos de feminidad de Los Altos, pero también de masculinidad, eso también se me olvidó mencionarlo, pero siempre estuvimos pensando mucho en eso. FICM: Por último, a través de María podemos ver cómo el tequila también se trata de un punto de unión y conexión entre la comunidad, ¿qué los llevó a crear una imagen más cotidiana de este proceso? JPG: Para responder tu última pregunta, creo que fue central para la idea de la película dedicarle mucho tiempo de narración a la vida cotidiana, porque sí, sentimos que generalmente en estas grandes narrativas, de este tipo de personajes como María, se pierde de vista que alrededor de estos personajes hay una vida que es completamente cotidiana y que no es que sea completamente ajena, y, bueno, en el caso de Dos Estaciones, para nada es ajena a esta gran narrativa de María, al contrario, digamos esa vida cotidiana interviene también en su vida y en esa narración ficcional del personaje. Eso es algo que nos interesaba muchísimo mostrar. Nos preocupa mucho cómo se ha representado en los últimos años, o quizá siempre, no sé, pero en los últimos años lo que sucede en lo que malamente llamamos "México rural", y digo malamente porque no hay un México rural sino muchísimos, digamos, cada lugar, cada sitio es un propio universo y por eso creo que no me gusta ese término. Precisamente al insertar estos momentos de vida cotidiana, al presentar más que insertar, presentar estos momentos de vida cotidiana en la película y darles un peso significativo en la narración, nosotros pensamos que expande mucho la noción de lo que se puede pensar que es un pueblo como este, como Atotonilco, el Alto.