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Mexicanos se presentan en la Berlinale 2024

Este fin de semana tuvieron su estreno internacional dos producciones con presencia de talento mexicano en el marco de la 74a edición de la Berlinale: La cocina, el nuevo largometraje de Alonso Ruizpalacios, y Another End, cinta del realizador italiano Piero Messina, protagonizada por Gael García Bernal y Bérénice Bejo. Ambas compiten por el Oso de Oro.

 

 

La cocina, es una coproducción México - Estados Unidos, protagonizada por Raúl Briones, Rooney Mara, Anna Diaz, Motell Foster y Oded Fehr, que etrata la vida de migrantes en la cocina de un restaurante de Nueva York donde se mezclan culturas de todo el mundo durante la hora punta del almuerzo.

De acuerdo con Carla Hannover, colaboradora de El Economista, la película está "matizada con reflexiones sobre los sueños, el capitalismo y el tiempo, la cinta está rodada soberbiamente en blanco y negro y acompañada de fondo con una sinfonía en la que las estufas, los sartenes, el golpeteo de los utensilios, la comida cocinándose, las voces, los pasos y todo cuanto ahí tenga capacidad de emitir sonido se tornan frenéticos conforme llega la hora pico del restaurante. Como si alguien hubiera apretado el acelerador, parar un momento en esa cocina no es una opción, ni siquiera cuando un río de Coca Cola cherry ha inundado descontroladamente el lugar".

 

 

Por otro lado, el mexicano Gael García Bernal y la franco-argentina Bérénice Bejo protagonizan Another End, del italiano Piero Messina, que también compite por el Oso de Oro. La película cuenta la historia de dos personas que se han amado y se siguen amando, incluso después de la muerte de una de ellas. Como si estuviera atrapado en un túnel de dolor, el afligido personaje de García Bernal intenta encontrar consuelo en un programa que ofrece sustitutos humanos a los fallecidos.

Asimismo, Nancatepec de Elena Pardo y Azucena Losana también tuvo su estreno en la Berlinale. Este cortometraje es una coproducción México-España que participa en Foro Expandido y se trata de una performance cinematográfica en 16 mm que se inspira en el Nanacatepec, una roca atravesada por una red que se extiende sin una forma definida. Sus frutos, en forma de hongos, sirven como creadores y transformadores de todo en el mundo.