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Los ojos del mar: una mirada íntima y real al duelo y la búsqueda de consuelo

Los ojos del mar, del director mexicano José Álvarez, formó parte de la Sección de Largometraje Documental Mexicano en el 15° Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) en 2018 y actualmente forma parte de la segunda etapa de Cine para todxs, una iniciativa del festival que tiene como objetivo revitalizar, por medio del cine mexicano, espacios dedicados a la promoción cultural en sus comunidades, en el difícil contexto de la crisis provocada por la pandemia de Covid19.

El documental actualmente puede verse en Prime Video.

Los ojos del mar (2017, dir. José Álvarez) Los ojos del mar (2017, dir. José Álvarez)

FICM: La idea de la caja como una ofrenda fue parte de lo que esperabas o en realidad surgió conforme se grababa la película. ¿por qué el espejo en ella?

JA: La idea fue de Hortensia, nosotros la apoyamos mientras iba creando esta historia. Nosotros queríamos que su sueño se cumpliera y ella me pregunto la manera en como podíamos hacerle llegar nuestros saludos a los pescadores. Ella propuso una especie de película y fue así como surgió la idea del espejo para que todos los familiares pudieran mandar un mensaje. También surgió la idea de poner un pedacito de su casa, la tierra de sus macetas, de su piso, para que sientan que también les mandan una parte de su hogar, también mandaron cartas, alimentos, saludos, una brújula.

La película cuenta esa conexión entre la tierra y el mar. De hecho, la película fue reconocida en Vision du Réel, Suiza, con el premio Signis, es un premio ecuménico que muchas religiosas otorgan a una película que aborde ritos religiosos. De hecho, ese premio también lo ganó Canícula en Francia. Es un premio muy interesante porque lo otorgan varias religiones, se junta la religión musulmana, católica y demás; para mi fue muy valioso pues en Los ojos del mar se inventa un rito, una ceremonia para poder encontrar el consuelo en los náufragos que no existe en ninguna otra religión.

FICM: Los ojos de mar es una mirada a la pérdida al duelo, pero en cierta parte también a la esperanza, aunque toda la película se desenvuelve entre la despedida el final rompe con esta línea.

JA: Creo que la película rompe con su objetivo. Se va crenado un ritual, al final de la película el baño de Hortensia no es gratuito pues lo que ella quiere es estar limpia y estar purificada para llevar la ceremonia. De una manera ella se convierte en la bruja o en el sacerdote de ese ritual, ella va con esa idea de generar un bienestar a las familias y creo que de alguna manera se cumple.

FICM: ¿Qué libertades has encontrado en el documental a diferencia de otros géneros?

JA: Pues yo creo que naturalmente soy documentalista. Cuando veo los procesos de una ficción me parecen tan complejos y en muchas ocasiones, incluso artificiales. A mi me parece que la propia vida de manera directa y fácil cuenta historias, desde mi punto de vista, muchos más interesantes que la ficción. La vida me atrae de manera más grande que la ficción, valga decirlo, me parece mucho más real; aunque entiendo que la ficción también tiene su dosis de realidad. A mi me parece que el documental te va llevando solo, es una especie de anzuelo, cuando tu persigues una historia documental es simplemente seguir un anzuelo hasta que te atrapa y en ese momento tu sigues una historia de una realidad y la vas documentando tal cual no necesitas artificios, solita te va llevando.

FICM: Como documentalista, ¿tú eliges las historias o crees que ellas te eligen a ti?

JA: Creo que uno puede bocetar algunas idea en su mente y en su corazón, en pensar por ejemplo en "Quiero hacer una película en el mar" entonces investigo que tengo que hacer, pero cuando llegas al mar te das cuenta que hay muchas historias del mar, el mar es un brote de historias permanente; además de esta idea romántica del infinito mar y de sus peligros y de tal, pues la idea del mar, vamos a montar una historia a partir del mar y las historias brotan solas y así fue con los ojos del mar. El día que llegamos al puerto nos encontramos con "La morena", con Hortensia y ella empezó a narrarnos la historia del naufragio y fue muy fuerte, en ese momento empezó a brotar una historia llena de aventuras y de drama.

Uno medio esboza una historia, pero en el momento en que te topas con los personajes te das cuenta que cada uno tiene su historia que hay muchas historias y solito vas dejando que la historia fluya. Tiene que haber una relación muy profunda entre los personajes para que surja entonces la verdad, la transparencia del personaje. Creo que las historias surgen.

FICM: Tratar con personas reales con historias propias y profundas implica un acercamiento y una intimidad entre ellos y el director ¿Cómo se aborda al personaje? ¿Cómo se construye la intimidad entre tú y ellos?

JA: Yo creo que cada persona es un personaje, cada persona tiene una historia que contar porque tiene una voz interior y porque existe ese dialogo que tenemos todos con nosotros mismos, yo creo que cuando logras sacar la voz interior surge el personaje y automáticamente lo haces cinematográfico. Particularmente Hortensia es un personaje muy poderoso, ella nos contaba sus sueños, sus aventuras, nos contaba su vida; como empezó a entrar a los barcos a partir de la prostitución, su amor por el mar. La película en cierto sentido también te va contando la vida de Hortensia, incluso la vida intima de los pescadores, como viven. En el barco se crea una relación familiar, de ayuda y de apoyo.

FICM: ¿Cuáles son las historias que crees que debe contar el documental mexicano hoy?

JA: En México hay tantas historias, tanto que contar y tanto que abordar; hay muy buenas historias. En el cine mexicano hay buenos documentalistas, buenos fotógrafos y también buenas historias. A mí, por ejemplo, me interesa mucho el tema espiritual, en mis documentales se han abordado diferentes prácticas de la fe y ello es muy rico porque México es un país muy devoto, existe un mundo espiritual muy importante, que pertenece al México profundo. En mi caso las diferentes formas de practicar la fe, pero creo que el documental mexicano esta ahí, en el drama que vivimos, en la corrupción, en los muertos, en la violencia.