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Entrevista a Diego Galán en el 14º FICM

Diego Galán presentó su nuevo documental Manda huevos (2016) en el 14º Festival Internacional de Cine de Morelia. Con el humor que lo caracteriza, al acariciar uno de los botones de su camisa, dice que hay que conservarlos y mimarlos desde un punto de vista cinéfilo, porque muchos de los celuloides fueron a parar en fábricas de peines y botones.

Diego Galán. Diego Galán.

Manda huevos (2016) es un documental realizado con material de archivo de 200 películas españolas, enfocado a cómo ha sido representado el papel de los hombres a lo largo de la historia del cine español.

¿Cuál fue el método que utilizaste para reunir todo el material?

Para hacer Manda huevos fueron recopilados fragmentos de más de 200 películas españolas. Es el producto de dos años de trabajo que surgió para hacer contrapeso a Con la pata quebrada (2013), la cual aborda el papel que ha tenido la mujer en el cine español. Sólo hacer esta película me ha tomado dos años, pero el resto, la vida entera.

El método que utilicé para realizar el documental, es el de un juguete fantástico, que se puede hacer en casa, bueno, de hecho Manda huevos está hecha en casa con material propio de dvd’s, de grabaciones de televisión y una vez terminado el borrador hubo que buscar las películas en buena calidad.

Sobre el tema que abordas en Manda huevos, ¿qué relación encuentras entre el cine mexicano y el español?

Todos hemos sufrido parte de las mismas cosas. Ha habido sufrimientos individuales por cada país. El cine mexicano y el español tienen muchísimos puntos en común, salvo que el mexicano es mucho más rico, mucho más divertido y mucho más imaginativo que el español, porque no existe la censura que durante 40 años hubo en España y que, creo, aún se sigue viviendo.

¿Imaginas en México una película como Manda huevos?

Sí, una película como ésta habría que hacerla sobre el cine mexicano. Ya sólo con las rumberas se tendría una película entera.

Nuestras culturas parten de las mismas barbaridades religiosas, de la vida moral-patriarcal, de todos estos horrores que hemos sufrido y que son comunes. Pensé hace años hacer una serie para la televisión que se llamaba Primas hermanas, que era fragmentos de películas en los que, por ejemplo, María Félix era abofeteada y la que se levantaba abofeteada era Sara Montiel en una película española, luego la película continuaba.