Competencia largometraje documental: Jalmá

El interés principal fue el de conocer y retratar las historias de cuatro cantantes con trayectoria, dos jóvenes y dos mayores, para conocer su mirada personal en torno al canto y sus historias de vida. De esta forma, buscaba comprender de mejor manera los elementos simbólicos que engloban el imaginario de la música yumana; los cantos y danzas que cuentan las historias cotidianas de los nativos de Baja California.

El equipo se formó durante la carrera. Fue gracias a los asesores de investigación, Norma Carbajal, Nelly Calderón y Sergio Cruz, maestros y amigos entrañables, que entré en contacto con los cantos por primera vez, ellos plantaron la semilla. Adrián Macías, colega, amigo y hermano, fue el brazo derecho en el proyecto; compañero de ida y vuelta durante el proceso de rodaje y post producción.

Yo creo que el proceso de montaje. Hay mucho contenido, muchas historias detrás de cada persona; escoger los aspectos y fragmentos que no se quedarían en el corte final, sin comprometer el resultado, es lo más difícil en estos casos. También siempre está la cuestión del tratamiento en el documental, existe un compromiso inherente en encontrar la forma en que éste no afecte o transgreda la esencia del tema de interés.

Me gustaría generar material etnográfico que, además de registro, sirva como introspección a nuestras culturas. También espero conocer y documentar culturas hermanas, latinoamericanas. Por otra parte, me gustaría realizar un proyecto de ficción, contado a través de personajes extraídos de una realidad no muy lejana.

Nos da muchísimo gusto, (¡es un honor vaya!) poder participar en la difusión de las culturas nativas de Baja California con este trabajo junto con los grandes exponentes del documental mexicano actual, en la importante plataforma que el FICM ha significado, desde sus inicios, para el cine mexicano.