05 · 07 · 05 Reflexionan después de La Caída del Reich Compartir en twitter Compartir en facebook Compartir con correo Copiar al portapapeles Clara Sánchez La elegida fue Traudl Jung (Alexandra María Lara) testiga en cuyos testimonios se basó el realizador Oliver Hirschbiegel (El Experimento, 2001) para articular esta cinta que narra los últimos días de la Segunda Guerra Mundial dentro de La guarida del lobo, cuartel en el que se refugiaron mujeres y niños en compañía de Adolfo Hitler. Lejos de lo que los libros de historia postulan, la presencia de Hitler en La Caída es la de un hombre suave en sus trato a las mujeres, con un tic constante en una mano y con la actitud desesperada de quien siente que está a punto de perder el poderío que lo llevó a la cumbre debido a que, para estas fechas,-1945-, al Fürher ya no lo obedecían varias de sus tropas porque estaban conscientes de su derrota y se negaban a seguir siendo carne de cañón. La película mantiene un ritmo constante cuyas vueltas de turca radican en las drásticas decisiones de los protagonistas, unos por mantener sus ideales, otros por su lucha en busca de un mejor futuro para los suyos y Hitler al evitar enfrentar las consecuencias de las atrocidades que provocó. Sin sumarse a ser una película más sobre el nazismo La Caída, cinta ganadora del premio a Mejor Guión en el Festival del Mar de la Plata, es una mirada sobria entorno a la mentalidad de los alemanes, sus temores, su fidelidad ciega, la esperanza de un futuro absurdo y la certeza de una supremacía racial no fundamentada. Durante las más de dos horas que dura la proyección se hace evidente el casi incomprensible liderato que Hitler logró entre sus seguidores -a tal grado de dar no sólo su vida, sino la de sus hijos- por un sistema político que consideraban como la única opción viable en sus existencias. Sorprende incluso la inocencia de personajes como Traudl quien durante los minutos finales de la película afirma haber ignorado la magnitud de las acciones que había realizado el Führer contra sus antagonistas, declara su ignorancia sobre los campos de concentración y acepta sentirse apenada por haber trabajado bajo sus órdenes. Traudl, sutil hilo conductor de esta historia, es el vehículo-metafórico reflexivo sobre la ceguera con la que actuaron muchos seguidores del nazismo, sin caer en maniqueísmo ni melodramas explotados de forma desgarradora. Por el contrario, la mesurada crudeza de la realidad es tan contundente como las decenas de imágenes que han dominado la historia fílmica del holocausto. La Caída (Der Untergang, Alemania, Italia, Austria, 2004)Dirige: Oliver HirschbiegelCon: Bruno Ganz, Alexandra Maria Lara, Corinna Harfouch, Ulrich Matthes, Juliane Köhler.
