30 · 03 · 18 El miedo, una motivación: entrevista a Diego Ros, director de El vigilante Compartir en twitter Compartir en facebook Compartir con correo Copiar al portapapeles Gabriela Martínez @GabbMartivel El vigilante, ópera prima de Diego Ros, formó parte de la Sección de Largometraje Mexicano de la decimocuarta edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), donde ganó el OJO a Largometraje Mexicano, el Premio Stella Artois y le dio a Leonardo Alonso el OJO a Mejor Actor de Largometraje Mexicano. En entrevista para el FICM, Diego Ros habló de su experiencia luego de ganar en la decimocuarta edición del festival y cómo fue dar el salto a la dirección de cine. ¿Qué significó para El vigilante ganar el OJO a Largometraje Mexicano en el 14° FICM? ¡Fue una gran sorpresa! Permitió que la película fuera vista por gente de otros festivales, lo cual fue un muy buen empujón. Me cambió por completo. De Morelia, El vigilante se fue a Friburgo, Suiza, Lima y Los Ángeles; fue precisamente en el Festival de Cine de Los Ángeles donde ganó el premio a Mejor Película Internacional. La película formó parte de las selecciones oficiales de esos cuatro festivales. Después se fue a Mar del Plata en Argentina; estuvo en Durango, Monterrey y Torreón, incluso participó en algunas muestras en París. Este año se va a presentar en España y Líbano. En total, El vigilante ha estado en más de 30 países. Tu carrera empezó como editor y postproductor, ¿qué te motivó a dar el salto a la dirección? Cuando estudié cine, tenía la idea de ser sólo editor. La tecnología ha permitido que las disciplinas se mezclen y así es como uno empieza a incursionar en diferentes ámbitos. Antes sólo los fotógrafos sabían cómo iluminar, por ejemplo, o conocían cómo hacer ciertos procesos, pero con la tecnología es más sencillo aprender a hacer más. Soy más editor que otra cosa. Me encanta editar y darle sentido al pietaje que por momentos parece no tener forma y, de cierta forma, editar me ha ayudado a escribir, de pronto editar es un poco como eso y te ayuda. El vigilante (2016, dir. Diego Ros) ¿Tienes algún realizador que consideres tu influencia? Hoy por hoy es Lucrecia Martel, sus películas crecen cada vez que las veo, es muy impresionante. ¿Cuáles son tus próximos proyectos? Estoy escribiendo un guion para una película sobre una actriz y su relación con su madre. Es algo totalmente distinto a El vigilante. Me inspiró Opening Night (1977) de John Cassavetes, sobre una actriz que no quiere participar en una obra de teatro porque no quiere hacer el papel como se lo piden, entonces piensa en renunciar, pero sabe que eso la haría sentirse fracasada y ese es su gran dilema. Estoy pensando en un guion con pocos personajes y me gustaría filmarla en México, mi interés es seguir haciendo cine mexicano. ¿Qué consejo puedes darle a los nuevos realizadores? No tengan miedo a fracasar, el miedo al fracaso es lo que más puede obstaculizar su trabajo. Cuando fracasas en algo, es una oportunidad para superar el miedo; de alguna forma, el fracaso te motiva y te da más energía par intentarlo de nuevo y hacer las cosas. Hay que vivir con ello, con la idea de que fracasar es una posibilidad, pero entre más pronto lo asumas, será mejor. No hay que dejar de intentar.