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Diarios de la Berlinale

Cuando se llega a Berlín lo primero que llama la atención es encontrar la ciudad en un estado de reconstrucción. Mirar la iglesia Gedächtniskirche destruida pero de pie y al lado una nueva iglesia moderna de cristales azules que muestra el espíritu resiliente de los alemanes. Berlín es una ciudad con una energía muy fuerte, con personalidad auténtica y segura. En el aeropuerto los organizadores esperan a realizadores, productores e invitados de la Berlinale. En la ciudad, en espectaculares, en paradas del bus y, por supuesto, en el metro, se ven los famosos carteles del oso. La Berlinale no se pierde de vista y toma a su ciudad con el frío que se tolera por la pasión de su programación.

El público recorre de estación en estación, de calle en calle, las diferentes sedes del festival para ser testigo del cambio, de la recuperación y de su gran fiesta al cine que descubre el mundo en el que vivimos pero también del que vinimos.

Su potencia habita en una programación vivida, experimental, sensible, original, diversa, vanguardista, abierta, agrupada en nueves secciones con más de doscientos documentales y largometrajes que se exhiben por toda la ciudad al comienzo del final de la temporada invernal. La sede principal es el Berlinale Palast donde tienen lugares las actividades principales como la inauguración, las galas de la competencia y la premiación.

El hecho de que existan varias secciones, no la hace inabarcable. Cada sección tiene claras sus fortalezas. La Competencia presenta los trabajos que aspiran al Oso de Oro y a los Osos de Plata que otorga el Jurado Internacional. Es una sección que exige el estreno internacional. En esta edición se seleccionaron trabajos de Francia, Rumania, Corea del Sur, Portugal, Estados Unidos, China, Austria, entre otros, ya sea en forma de ficción, animación o documental.El jurado, en la ceremonia de clausura, premió con el Oso de Oro a la película húngara En Cuerpo y Alma, de Ildikó Enyedi que fue proyectada al término de la ceremonia de premiación. Además de este galardón, se otorgan los Osos de Plata al Premio del Jurado (Félicité, de Alain Gomis); al Mejor Actor (Georg Friedrich por Bright Nights), Mejor Actriz (Kim Minhee por On the Beach at Night Alone), Mejor Guion (Sebastián Lelio y Gonzalo Maza por Una Mujer Fantástica), Mejor Director (Aki Kaurismäki por The Other Side of Hope), el Premio Alfred Bauer (Pokot de Agnieszka Holland) y el premio a la Excepcional Contribución Artística (Dana Bunescu, editora de Ana Mon Amour).

Para Dieter Kosslick, director de la Berlinale, la Competencia de este año, pone de relieve el panorama en el que nos encontramos: el colapso de las grandes utopías y la desmitificación de la globalización y, a la vez, las películas muestran la esperanza al presentar contextos y realidades en los que aún es posible maravillarse: “Tal vez las historias acerca de individuos fuertes y las ideas de estos excelentes artistas, están supliendo las utopías porque sin éstas sería imposible crear este mundo”.

Además del Oso de Oro y de los premios del Jurado Internacional, la Berlinale reconoce con sus premios oficiales a otros trabajos: el Oso de Oro al Mejor Cortometraje, el Premio a la Mejor Ópera Prima y al Mejor Documental Original, éstos dos últimos se premian entre todo lo que se mostró en las secciones que conforman al festival, incluyendo a la Competencia.

Cada sección tiene su propia relevancia artística y, por tal motivo, se han creado premios paralelos independientes para reconocer las propuestas innovadoras que abarcan escenarios amplios, realidades veladas, lugares recónditos. Como por ejemplo, el Premio del Público de la sección Panorama, donde se incluyen trabajos que no exigen el estreno internacional y que ofrecen una visión colorida del mundo mostrando lugares tan remotos como Kyrgyztan, Bhutan, Sudáfrica y de culturas tan fascinantes como Japón, Turquía y Taiwán. Las película que recibieron el Premio del Público de Panorama fueron: en primer lugar, Insyriated, de Philippe Van Leeuw (Líbano) sobre un dilema moral familiar en medio de un conflicto bélico; el segundo lugar fue para la película japonesa Close-Knit, de Naoko Ogigami que aborda la historia de Tomo, una niña que tras ser abandonada por su madre, encuentra refugio en la casa de su tío y su novia Rinko, una mujer transexual que cuidará de ella. El premio del Público al Mejor Documental fue en primer lugar, para I Am Not Your Negro, de Raoul Peck y para Chavela, de Catherine Gund y Daresha Kyi, sobre la vida y amores de la cantante mexicana.

También destaca el Premio Teddy, que a través de un jurado internacional, reconoce a los mejores filmes con temática LGBTQ de todas las secciones de la Berlinale. El premio se entrega en un evento que reúne a la comunidad artística queer internacional. El jurado visualiza los filmes de todas la secciones que incluyen una temática relacionada y reconoce a la más valiosa. Este año el filme del chileno Sebastián Lelio, Una Mujer Fantástica, fue distinguido con el premio. Otros premios paralelos son el Premio Ecuménico del Jurado, el FIPRESCI, el Premio Amnistía Internacional, el Premio de los Lectores, entre otros. La Berlinale es un festival que acentúa las temáticas pertinentes de analizar y las pone al centro de la conversación.

La sección Forum y Forum Expanded contiene propuestas que juegan con la forma y la narrativa del lenguaje cinematográfico. Son trabajos de observación, análisis y experimentación “que es difícil catalogar en forma de documental o ficción” con más de cincuenta filmes y una variedad de contenidos para todas las audiencias. En Forum Expanded películas e instalaciones cuestionan la realidad de las convenciones y de las ideas. Cómo éstas tienen origen y cómo se desenvuelven en los diferentes contextos y en el procesamiento de la información.

Generation es una sección dedicada al público más joven. Se divide en películas para mayores de catorce años y menores de esta edad. Su principal objetivo es la formación de un público joven crítico que esté cerca con las problemáticas mundiales actuales pero también con un cine que promueva la imaginación y la creatividad, ya sea desde la ficción, el documental o la animación.

La sección de Perspektive Deutsches Kino incluye nuevas propuestas de noveles cineastas alemanes que crecieron en el cambio de milenio. Retrospective hizo una curaduría del género de la ciencia ficción desde sus inicios donde se incluyeron películas como 1984, de Michael Anderson y La Guerra de los Mundos, de Byron Haskin en un programa llamado Future Imperfect. La sección Homenaje fue dedicada a Milena Canonero, famosa y reconocida por su trabajo como diseñadora de vestuario de películas como El Resplandor, de Stanley Kubrick y El Gran Hotel Budapest, de Wes Anderson.

Vivir un festival con propuestas tan artísticas y sensibles en una ciudad enérgica y madura, hace evidente el carácter del cine que propone. Nunca un cine lastimoso. La ciudad acompaña verdaderamente cada actividad y uno vive la Berlinale con un espíritu inspirador para crear, ver y reimaginar. Las funciones de estas películas tienen lugar principalmente en Potsdamer Platz, zona de Berlín donde se alojan las oficinas de la Berlinale. Las demás sedes, que se distribuyen por la ciudad, son fáciles de acceder en transporte público, además afuera de cada una puede verse un marco rojo de led que las identifica.

La organización del festival es muy cercana al público que puede acceder a las funciones comprando un boleto cuyo costo oscila entre los 11 y 14€. En Potsdamer Palast se pueden adquirir los boletos del mismo día y de un día después. En las demás sedes también pueden comprarse boletos en las taquillas. Si los boletos se encuentran agotados, hay una fila de espera en caso de que se liberen boletos de última hora. Conforme pasan los días, el público, críticos, periodistas, conviven orgánicamente entre cada función y se empiezan a escuchar los títulos favoritos.

El catálogo de películas es un Journal (Diario) donde se puede consultar la información de las funciones de cada película. Aparte, cada sección y programa especial cuentan con un folleto individual para consultar a detalle el programa. Los folletos y revistas se pueden tomar gratuitamente en cada una de las sedes y también están en formato digital en la página web.

En el marco de la Berlinale, tiene lugar el European Shooting Stars, un evento que presenta tanto al público, a la prensa como a la industria, a las nuevas estrellas europeas del cine. Este año fue apadrinado por Timothy Spall, antes de presentar la película en competencia con la que participaba, The Party, de Sally Potter y la distinción fue dada a nuevas promesas del cine como Louis Hofmann de Alemania, Tudor Aaron Istodor de Rumania, Victoria Guerra de Portugal y Marusa Majer de Slovenia. Este reconocimiento se le ha dado a actores como Daniel Craig, Rachel Weisz, y Alicia Vikander. El reconocimiento es importante porque la Berlinale pone en el centro a quienes serán los protagonistas del cine que promueve.

La Berlinale ofrece un panorama del mundo muy completo. Directores japoneses (Sabu), documentales palestinos (Ghost Hunting), dramas italianos (Call Me By Your Name), animaciones chinas (Have a Nice Day). Es una programación que busca perspectivas del mundo. Producciones de arte y producciones independientes que generan diálogo y provocan apertura por sus temáticas incluyentes.

La Berlinale se asoma al mundo como es, sin ninguna tendencia, sin ningún prejuicio. En la Berlinale conocemos realidades que creíamos invisibles, que nos sensibilizan y sobre todo nos sorprenden: en un documental sobre algún artista contemporáneo (Beuys), sobre el sistema de salud de un hospital de maternidad (Motherhood), sobre una chica transgénero (Una mujer Fantástica), o sobre temas como el amor (En Cuerpo y Alma), la familia (Close-Knit), la justicia (Casting JonBenet). De España (Pieles), de Francia (Barrage), de Canadá (Maudie) o de Alemania (The Yooung Karl Marx). La Berlinale abre el panorama y engrandece los mundos que quedaban estrechos.